A las siete menos diez se produjo el fatal accidente que se saldó con la muerte de dos operarios de la planta de residuos urbanos y tóxicos, Verinsur, ubicada en la Dehesa Bolaños. Los fallecidos, Francisco Villar, de 43 años de edad, y José Soto, de 39, eran vecinos de El Puerto, y se encontraban reparando una tubería en un pozo de residuos muy peligrosos cuando uno de ellos se precipitó al fondo. El compañero, que bajó a rescatarlo, estuvo a punto de sacarlo, pero justo cuando iba a alcanzar el borde de la fosa, resbaló y cayeron los dos, según fuentes cercanas a la propia empresa. Un tercer trabajador, que sí bajó equipado con la mascarilla reglamentaria, intentó rescatar a ambos pero le resultó imposible. Éste último ha sido ingresado en el hospital portuense, Santa María del Puerto. La muerte de los dos operarios y el ingreso del tercero se ha producido, según las mismas fuentes extraoficiales, por intoxicación por etanol. Este aspecto está aún por confirmar hasta que se conozca el resultado de la autopsia de los operarios fallecidos, que fueron trasladados al Anatómico Forense de Cádiz.
Villar, muy conocido entre los compañeros, era el encargado de mantenimiento de la firma y trabajaba en la planta de residuos desde que ésta comenzó a funcionar, por eso no se explica cómo pudo acercarse a la fosa, donde se depositan vertidos peligrosos, y no aclaró si la falta de protecciones es una práctica habitual.